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Felicidad o Alegría: ¿Qué deseas?

Oct 29, 2025

La alegría es diferente de la felicidad: La felicidad es una sensación placentera provocada por influencias externas. Es fugaz, a menudo temporal, y suele surgir de un acontecimiento que genera una sensación de emoción.
Puede que no distingas las sutiles diferencias entre la alegría y la felicidad, pero lo que la mayoría de la gente realmente desea es alegría.
Sin embargo, se ha escrito mucho menos sobre la alegría y cómo alcanzarla, mientras que la felicidad domina las conversaciones, los podcasts y los estudios científicos.
 
George Valliant, doctor en medicina, profesor de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard afirma que la alegría es la emoción menos estudiada:
 
“Durante los últimos 20 años, la emoción ha sido un invitado indeseable en la mesa de la investigación académica. Tratamos la alegría como algo secreto, sucio y horrible, como en la época victoriana trataban el sexo. La felicidad es en gran medida cognitiva; es un estado mental, no una emoción. Por eso a los científicos sociales les encanta estudiar la felicidad. La felicidad es dócil”.
 
Si la felicidad es dócil, ¿es la alegría una satisfacción dichosa y una satisfacción general con la vida? 
 
La felicidad, señala, activa el sistema nervioso simpático, la parte del sistema nervioso autónomo que estimula la respuesta de «lucha o huida». En cambio, la alegría estimula el sistema nervioso parasimpático, que controla las funciones de «descanso y digestión».
 
Desde otra perspectiva, e autor y maestro espiritual Eckhart Tolle sugirió la diferencia:
“El placer siempre proviene de algo externo, mientras que la alegría surge de nuestro interior”. -Eckhart Tolle
Por lo tanto, la felicidad es una sensación positiva y placentera que surge de algo que nos sucede; la alegría es la sensación interna de serenidad que podríamos describir como “feliz sin motivo alguno”.
 
Brené Brown, profesora de investigación de la Universidad de Houston, ha dedicado 2 décadas al estudio de la valentía, la vulnerabilidad, la vergüenza y la empatía. Habla del esfuerzo necesario para alcanzar la alegría:
 
“Simplemente no podemos conocer la alegría sin aceptar la vulnerabilidad."
 
 
CULTIVANDO LA ALEGRÍA
 
Ser alegre, o estar lleno de alegría, es abrazar la vida a pesar, o quizás gracias a, el inevitable dolor o la tristeza que la acompaña.
Las personas alegres entienden que la tristeza y la angustia son parte de la vida, pero su alegría les brinda la capacidad de superar el miedo a pesar del desafío o la pérdida.
 
En una cultura que busca lo extraordinario: la riqueza, la influencia o el éxito, apreciar y abrazar los placeres sencillos de la vida se pasa por alto y se desestima.
 
Pero es en esos momentos cotidianos donde se cultiva la alegría.